"Nadie los lloró. Nadie les llevó flores a la tumba. Nadie les deseó el típico “descansen en paz”. Nadie. Como ningún doliente reclamó sus cuerpos, le tocó al Estado hacerse cargo y gastar hasta más de RD$50,000 en cada uno, porque eran cadáveres que había que preparar y sepultar, como a todos, aunque estos sean muertos olvidados".
Los invitamos a continuar disfrutando de este reportaje publicado en el Diario Libre de República Dominicana a través del siguiente link:
No hay comentarios:
Publicar un comentario