"El pequeño obelisco que recuerda a la Congregación de las religiosas Adoratrices está tirado en la hierba. Es lo único que sobrevive de un sencillo mausoleo que estaba rematado por una cruz. A su lado, lápidas destrozadas de militares que lucharon en la Guerra de Melilla en las campañas de 1911, 1919 o 1922, con los nombres de los respectivos regimientos. Las tumbas estaban reunidas en una espacio cercado por balaustres, de los que sólo queda la base. En el centro, una cruz sobre un monolito cuadrado lleno de pintadas y con el revestimiento de lápidas arrancado".
Los invitamos a continuar leyendo esta triste noticia y aguda denuncia publicada en el diario La Opinión de Málaga a través del siguiente link:
No hay comentarios:
Publicar un comentario